Proyecto Sur: la izquierda que quiere la derecha, por Santiago Fraschina

Capital Federal (Agencia Paco Urondo)

El argumento de Proyecto Sur para no apoyar al gobierno kirchnerista son fundamentalmente dos.
Por un lado, el kirchnerismo no atacó la renta minera, ni tampoco fue por la renta financiera, se apoya en los grandes grupos económicos, no nacionalizó los recursos naturales, realiza el tren bala pero no reconstruye el sistema ferroviario argentino, etc. Es decir, el gobierno de Kirchner puede haber creado puestos de trabajo, puede haber reducido la pobreza y la indigencia, puede haber mejorado la situación de los jubilados, puede haber favorecido un cierto proceso de industrialización, puede haber pagado la deuda al Fondo Monetario Internacional, pero tiene muchas deudas para ser un verdadero gobierno nacional y popular.
Por otro lado, argumentan desde Proyecto Sur, el kirchnerismo se apoya en esa estructura corrupta de la CGT y el Partido Justicialistas, los cuales en su pasado apoyaron también al menemismo que implicó el vaciamiento del país. Argumentan entonces que es imposible apoyar a un gobierno que construye con los corruptos gobernadores del conurbano bonaerense, con Moyano, Alberto Fernández que fue diputado con Cavallo, con De Vido, y tantos diputados y senadores que fueron cómplices de la década del noventa.
Con este razonamiento Claudio Lozano en representación de Proyecto Sur votó en contra de la resolución 125 del gobierno nacional que fijaba retenciones móviles para el núcleo sojero que, gracias a los precios internacionales, están recibiendo una renta extraordinaria. Y por estos mismos motivos Proyecto Sur decide ser oposición del gobierno nacional.
Como conclusión de esto entonces Proyecto Sur sólo apoyaría un gobierno que este decidido a distribuir el ingreso si al mismo tiempo grava las rentas mineras, petroleras, ataca a los grandes grupos económicos, nacionaliza los recursos naturales, reconstruye la red ferroviaria del país, ataca a las empresas extranjeras, realiza una reforma tributaria progresiva pero también se apoya en personas sin pasado dudoso con un férreo compromiso nacional y popular, es decir, se apoya solamente en intendentes, gobernadores, diputados y senadores sin historia ni en el menemismo ni en el radicalismo ni en el duhaldismo.

Entonces sólo si se da esta situación Proyecto Sur esta dispuesta a apoyar un gobierno dispuesto a distribuir el ingreso. Es decir, nunca. Entonces la posición de Proyecto Sur es quedar como una izquierda “pura”, no contaminada, cuya única función es ser fiscal de todo y señalar con el dedo a los demás por ser cómplices de todas las “atrocidades” del kirchnerismo.
Una posición bastante cómoda pero poco comprometida. Por otro lado, es la izquierda preferida por la derecha. En efecto, es la izquierda más inofensiva, que ataca verbalmente pero con poca posibilidad de cambio real. (Agencia Paco Urondo).

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